Los cementerios en Colombia son un negocio privado: Medicina Legal
El director del Instituto de Medicina Legal, Carlos Valdés, en diálogo con La W Radio se mostró una vez más preocupado por la situación de los cementerios públicos del país y la dificultad que representa para la entidad la identificación de cuerpos depositados en fosas comunes.
Durante años las administraciones de los cementerios, que en su mayoría están bajo la administración de la curia, no han llevado un registro de los cuerpos de personas no identificadas que son depositadas allí.
"Los cementerios son un negocio, y a quién le importa un cuerpo que no le reedita nada", señaló Valdés quien además anunció que el Instituto está próximo a crear nuevos reservorios para cadáveres. A la fecha hay más de 4.800 en Yopal y se espera ampliar esta cifra con la ayuda de la Cruz Roja en Buenaventura con otros 200 más.
‘El Instituto se proyectó a que tenga esos centros de memoria en las regiones más azotadas por la violencia’. Medicina Legal no volverá a regresar cadáveres a los cementerios para evitar que las investigaciones puedan verse obstaculizadas por un mal registro de los cuerpos en esos lugares.
Sin coordinación interinstitucional
Para Diana Arango, directora del Equipo Colombiano Interdisciplinario de Trabajo Forense y Asistencia Psicosocial (Equitas), el principal obstáculo en la labor de identificación y entrega de cuerpos es "la falta de coordinación interinstitucional entre las diferentes entidades del Estado que están encargadas de buscar a las personas desaparecidas".
Arango señaló además la importancia de que se asigne un presupuesto que responda a las necesidades y que los familiares puedan participar activamente de este proceso. ‘Yo creo que es necesario que el Estado respalde y apoye la labor que hacen las organizaciones de derechos humanos, forenses o las organizaciones de víctimas en cuanto a la búsqueda de la verdad en los casos de desaparición forzada’.
Transparencia total para el posconflicto
Carlos Valdés, director de Medicina Legal, advirtió que en un eventual escenario de postconflicto la búsqueda e identificación de personas desparecidas debe estar matizado por la transparencia y por la verdad. "La verdad científica es transparente y todo el mundo puede acceder a ella".
Esto en relación a la desconfianza que han manifestado tener las organizaciones de víctimas sobre la idoneidad de las investigaciones forenses que se adelantan en el país. Al respecto Valdés señaló que "durante años el Estado no ha dado respuestas satisfactorias y queda en el ambiente una gran desconfianza en la administración de justicia".
Con relación a esto Diana Arango de Equitas afirmó que es necesaria una segunda opinión que sea independiente, seria y rigurosa "frente a los casos de desaparición forzada para poder establecer, cuando esa persona sea finalmente exhumada y entregada a sus familiares, lo que qué ocurrió y por qué fueron desaparecidas y en qué circunstancias murieron".
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